Como abejas a un panal

Explicación breve de por qué mi hijo es como es o por qué soy como soy

Andrés J. Colmenares. Wawawiwa Design.

Todos formamos parte de un sistema (familia, escuela, sociedad, trabajo) nacemos y nos desarrollamos en él. Tal como un reloj, nos movemos al mismo ritmo y en la misma dirección que todo el sistema en el que nos desarrollamos, si por alguna razón llegamos a querer movernos a otro ritmo: 

a) El sistema nos expulsa (porque nos necesita funcionando de la misma manera que él) 

b) El sistema se adapta al cambio

Cualquier sistema, incluso los biológicos, prefiere la primera opción, pues es mucho más fácil 

cambiar el mecanismo de un solo organismo que cambiar toda la máquina. 

Esto se puede ver en los ejemplos más comunes y traspolarse a las interacciones humanas 

¿Qué hacemos con un reloj que nos gusta mucho y de repente se para? Checamos cuál es la falla y la cambiamos, por lo general será una pieza, la pila a lo mejor. No tiramos a la basura el reloj, y esto no lo hacemos por diferentes razones. Incluso si está un poco desgastado, si se descompone a cada rato, nos apegamos a él y hacemos todo lo posible por procurar mantenerlo con nosotros.

Esto también pasa en las personas 

El alcoholismo, adicciones, el enojo, el narcisismo y todos aquellos hábitos que nos ha costado tiempo adquirir, nos provocan apego. Este apego no es consciente (en muchas ocasiones) nos decimos a nosotros mismos que ya no queremos ser así, sin embargo, cada  hábito humano, por malo que parezca, está ahí por una razón.

 Imaginemos ahora que el reloj del que hablábamos por alguna extraña razón, necesita girar al revés, a simple vista se ve defectuoso pero las necesidades del reloj o tal vez de las personas que lo poseen, necesitan que el reloj funcione de esa manera y no de otra. De la misma manera es nuestra familia.

Llena de “defectos” o “hábitos” nos ha llevado a que nuestra actitud, nuestras características dentro del sistema sean “funcionales” para la familia ¿Pero cómo? ¿Cómo puede ser funcional un alcohólico que sólo hace daño a su familia? o ¿Un adolescente problema? o ¿Un niño que  sufra de bullying? Bueno, hay otra parte muy interesante de las familias, llamada pauta. Esta normalmente se conforma por una o más creencias que rigen todo el sistema familiar. OJO, la pauta NUNCA se dice de manera abierta ni directa, eso hace aún más difícil todo de cambiar. En función de cuál sea la pauta actuamos como imanes, atraídos de maneras inconscientes en relación a lo que aprendimos en nuestro pasado ¿Por qué? Porque no conocemos otra forma de actuar. 

Por último imaginemos que este reloj que gira al revés o la persona con el defecto o hábito que de alguna manera es funcional en su familia, va a otro sistema que funciona diferente (trabajo, escuela, amigos) ¿Qué va a pasar? No va a encajar, tendrá problemas, lo verán raro, querrán cambiarlo, pero no será tan fácil, porque ese reloj o esa persona, regresarán a casa tarde o temprano y tendrá que funcionar de la misma manera nuevamente. 

Es por eso, que en los colegios, se necesita ver a la familia, necesitamos saber qué pasa en casa, qué pauta rige a la familia que lleva al niño a comportarse así, el niño no posee un nivel de introspección tan amplio como para decirnos: “Lo que pasa es que la pauta de mi familia es esta y por eso yo debo ser así” y aún si lo supiera sería muy difícil que el niño pudiera decir: “Familia, me doy cuenta de la pauta, deben cambiar” y aún más mágico que la familia respondiera: “Tienes razón cambiemos” 

Por último, pensemos en un hábito de nosotros que no nos guste, el que sea. Y ahora pensemos en cuántas veces hemos intentado cambiarlo y lo difícil que ha sido o sigue siendo. De la misma manera, aún cuando la familia o las personas tenemos consciente cuál es el problema, no es garantía de resolverlo de manera rápida y fácil, cada quien tiene su ritmo. 

Así que papás, lamento revelarles que sin que ustedes hayan querido, la forma de ser de sus hijos es resultado de una interacción familiar que obedece a La Pauta familiar (que va pasando de generación en generación) pero no se apachurren ni se deslinden, sepan que en el momento en que ustedes acepten esto, ganan poder. Pues sí la interacción familiar perpetuada por ustedes ha creado aquello que los incomoda o los angustia, sólo ustedes pueden cambiarlo. Los invito a que lo hagan, sus hijos lo merecen. 

En el siguiente artículo explicaré de manera sencilla y con más detenimiento ¿Qué es La Pauta? En el intermedio si tienes alguna duda, comentario o sugerencia, escríbelo aquí abajo. 

¡Chao!

                                 MTFS Ana Isabel Sarmiento

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